PO-58

 PO-58

La cavidad marcada como PO-58, descubierta en el año 2019, era una de las grandes esperanzas para la campaña del 2020. Pero muy a pesar nuestro no dio los resultados que esperábamos, ya que ni su profundidad ni su desarrollo alcanzaron grandes cotas. 

Localizada en la Vega de l’Engraneu, en el fondo de una gran dolina muy próxima a los grandes cortados que caen hacia el Duje, la PO-58 posee una gran boca de entrada en forma de abrigo. Con escasa profundidad y desarrollo, esta zona inicial de la cavidad era ya conocida por los pastores. Entre los bloques que tapizan, tanto el suelo como alguna de las paredes de la cueva, apreciamos una notable corriente de aire.

Entrada a la PO-58, situada en el fondo de una dolina.

Un estrecho conducto entre los bloques, nos sitúa en una estancia de techo bajo y muy incómoda. Esta estancia se encuentra atravesada por una fractura vertical, estrecha, y con gran cantidad de bloques y piedras inestables. El acceso a esta vertical que da continuidad a la cueva, es extremadamente dificultoso, ya que el ángulo que hay que salvar, unido a la poca altura del techo en este punto, hacen que superar este paso sea la mayor dificultad técnica de la cavidad. Inicialmente este P-14 es estrecho hasta el punto de limitar los movimientos del explorador. En sus metros finales la vertical gana amplitud con dimensiones más cómodas.

Acceso a la vertical de 14 m que da continuidad a la cavidad.

Ya situados en la base del P-14, una rampa con grandes bloques y piedras inestables, nos sitúa en la cabecera de un P-6. Tras esta pequeña vertical, de nuevo encontramos una rampa de fuerte inclinación, y también tapizada de grandes bloques. Tras esta rampa la cavidad gana amplitud y el techo se eleva hasta sobrepasar los 10 m de altura. En este punto la cavidad continúa descendiendo. Un resalte de 3 m fácilmente destrepable nos sitúa en una estancia de menor tamaño que la anterior, tras la cual la PO-58 reduce drásticamente sus dimensiones. Un conducto estrecho y con fuerte inclinación, desciende hasta quedar colapsado por derrubios, impidiendo cualquier continuidad a los -43 m de profundidad. Punto donde la PO-58 finaliza.

Conducto final, donde finaliza la PO-58 a los -43 m de profundidad.

Volviendo al P-14 de entrada, y en su mitad encontramos un conducto freático, que con continuo descenso nos permite conectar a través de un P-10 con la sala anteriormente descrita, aportando algunos metros más al desarrollo de la cavidad.

La PO-58 ofrece unos resultados de -43 m de profundidad, y 106 m de desarrollo. Exploración finalizada.

Topografía de la PO-58.